Los asuntos de Alemania atraen hoy, con preferencia a los demás asuntos, la atención de Europa. Los rescriptos imperiales, las elecciones del Reichstag son la materia del día. El poderoso imperio se ve amenazado de gravísima crisis, y aunque por el momento conjure los peligros la consumada habilidad del canciller de hierro, el mal es hondo, y la política ha de entrar pronto en aquel país por vías nuevas.